62º Berlinale

Hoy es el estreno mundial de "Dictado", la única película española que compite por el oso de oro, en horario estelar de las 22:30h. Las entradas a la venta en internet se agotaron en pocos minutos (tiempo en el que además la web del festival estuvo colapsada), así que a primera hora me voy con Gema a la taquilla del Haus der Berliner Festspiele, donde la cola llega hasta la calle. La alfombra roja ya está preparada para recibir esta tarde a Angelina Jolie, que presenta "In the land of blood and honey" como realizadora.
Por fin podemos hacer la cola, pero ya vemos en la pantalla electrónica que las entradas están agotadas, no sólo para "Dictado" sino también para todas las películas que nos hemos marcado en el programa. Otras aún no están a la venta ya que salen con tres días de anticipación. Cambio de planes. Preparo una paella para mis compadres, por si es lo único español que vemos hoy.

Por la tarde nos vamos a Postdamer Platz para ver el ambiente del festival. Hace un frío que pela y no hay mucha gente en los alrededores del Berlinale Palast, tan solo un equipo de televisión, un par de fotógrafos y un grupo de adolescentes apostados al pie de la alfombra roja.

- ¿Esperáis ver a algún actor?

- A Angelina Jolie.

- ¡Pero si no es en este cine!

Los adolescentes salen disparados hacia el metro y el lugar queda casi desierto. Preguntamos a un portero vestido con chaqué y una gruesa capa. Nos contesta en castellano porque aquí el que más y el que menos ha estado en Mallorca, y nos dirige a la taquilla del teatro, que está vacía también:

- ¿Hay alguna posibilidad, por pequeña que sea, de conseguir entradas para cualquier cine y sesión de "Dictado"?

- ¿Queréis por ejemplo para el estreno, esta noche?

- (¡!) ...¿Tiene séis?

- Quedan unas 80

No entiendo el sistema de venta de entradas del festival. Comienza la operación telefónica para rehacer los planes con los amigos. Unos están en Alexanderplatz y ya han comprado entradas para ver un documental uruguayo, otra pareja ha conseguido reserva en un restaurante...

Después de cenar rápido llegamos al teatro con el tiempo. El resto del grupo aún no ha llegado y preguntamos al portero vestido como Harry Potter si le podemos dejar las entradas. Nos contesta afirmativamente pero tenemos que escribir los nombres en las mismas. Mientras Gema habla por teléfono y yo aprendo a pedir un boli en alemán, pasan los actores Juan Diego Botto y Bárbara Lennie junto con el director Antonio Chavarrías y la niña Mágica Pérez. Mágica no ha parado de tiritar desde que se ha bajado de un BMW de época, y apenas puede responder a las preguntas de los periodistas. Como no hemos encontrado a nadie que nos prestara un bolígrafo, Gema escribe los nombres en las entradas con un lápiz de labios. Es lo que tiene la alfombra roja, que te saca el glamour.

Deseamos suerte al equipo de la película mientras la organización del festival los lleva casi en volandas por la escalera para cumplir con el horario previsto. El público los recibe con aplausos cuando entran en la sala.

"Dictado" no es un peliculón y suena a fórmula muy vista últimamente (thriller psicológico con niño), pero entretiene (de eso trata el cine, ¿no?) y pasamos un buen mal rato. Hay una escena que me parece muy fuerte, se trata del suicidio de uno de los personajes mientras está en la bañera con su hija. A ratos baja el tono del guión, pero en general mantiene la atmósfera de thriller. Destaca la interpretación de Bárbara Lennie, habrá que estar atentos a lo que hace esta actriz.

Los espectadores aplauden la película mientras pasan los créditos. La ovación se repite cuando el equipo artístico sube al escenario del Berlinale Palast. El director dice que el público de la Berlinale es el más caluroso del mundo. "Será para compensar el frío que hace afuera" -contesta Juan Diego Botto-.